Zapotlán el Grande, Jalisco, vive un momento de duelo e indignación tras el feminicidio de Katia Daniela Medina Rafael, reconocida activista trans y directora del Colectivo Trans Zapotlán. Su cuerpo fue hallado el pasado fin de semana en una brecha al norte del municipio, con claros signos de violencia.
Katia Daniela dedicó su vida a defender los derechos de las personas trans en el sur de Jalisco, liderando iniciativas para promover la inclusión, la dignidad y el respeto hacia la diversidad sexual.
De acuerdo con las autoridades, su cuerpo fue encontrado en una zona que conecta con la carretera libre y el crucero de La Catarina, en Ciudad Guzmán. Personal de la Fiscalía Regional y del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses acudió al lugar para iniciar las investigaciones y trasladar el cuerpo al Servicio Médico Forense.
La presidenta municipal, Magali Casillas, confirmó la identidad de la víctima y condenó no solo el crimen, sino también la forma en que algunos medios locales han tratado la noticia, refiriéndose a Katia como “hombre vestido de mujer”. Casillas calificó esta cobertura como una grave falta de respeto a su identidad y un retroceso en materia de derechos humanos.
En un pronunciamiento oficial, exigió que la investigación se realice con perspectiva de género y diversidad sexual, y que el caso sea tipificado como feminicidio:
“Que este crimen no quede impune”, afirmó, haciendo un llamado a la justicia y a la ética periodística para respetar el nombre y la identidad de las víctimas trans.
Colectivos y activistas de la región ya están organizando movilizaciones para exigir justicia y honrar la memoria de Katia Daniela, recordando que su lucha debe continuar para erradicar la discriminación, la violencia y los discursos de odio.
