“Yo no la creía y hasta ahora no lo creo. Es una alegría total tener el documento en mis manos con todos mis datos tal como corresponde y como me identifico ante la sociedad”, dijo Vásquez.
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Desde que nació, Maya vivió con el nombre de un varón escrito en sus documentos, aunque desde hace ocho años todos la conocían por el nombre que en aimará significa única. Con la nueva partida de nacimiento, sus papeles que la reconocen como ciudadana podrán ser cambiados.
Anunció que, de inmediato, iniciará el trámite ante el Servicio General de Identificación Personal (Segip) para obtener un nuevo carnet de identidad y luego seguirá el proceso para el cambio de nombre en su título de técnica en imagenología.
Maya es la principal activista de la comunidad de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (LGTB) en Potosí y una de sus principales misiones fue siempre hacer respetar los derechos de esta población, por ello tuvo estrecha relación con varias instituciones públicas y privadas.
En cuanto se promulgó el reglamento de la Ley de Identidad de Género, Maya reunió sus documentos y acudió, junto al representante del Defensor del Pueblo de Potosí, a realizar una capacitación al Servicio de Registro Cívico (Sereci) y al Segip respecto a los derechos de la comunidad trans y que los funcionarios entiendan la importancia del cambio de nombre. “Aunque ellos ya sabían todo, teníamos que estar ahí para informar. Me organicé y realicé la capacitación. Creo que eso hizo que el trámite fuera mucho más llevadero y rápido, no me puedo quejar del buen trato que recibí”, dice.
La mañana del 1 de agosto, fecha en la que de acuerdo al reglamento se podía iniciar el trámite para el cambio de nombre, Maya acudió a las oficinas del Sereci 45 minutos antes de lo previsto.
Tenía todos sus papeles en orden y fue la única, hasta la fecha, en presentar en Potosí la solicitud que demanda ocho requisitos. La entrevista psicológica se la realizaron en 48 horas.
El miércoles 10 por la noche, 10 días después de haber presentado sus documentos, Vásquez recibió una llamada de los funcionarios del Sereci para pasar a recoger su documento.
“Hoy (ayer) es un día histórico para la comunidad LGTB de Bolivia porque Serecí entrega la primera partida de nacimiento que permite que se respeten los derechos de esta población”, afirmó Vásquez.
Aunque aseguró que dentro de su tierra nunca fue discriminada por su identidad sexual, indicó que tener un documento y una identidad que no coincidían con su aspecto físico era discriminatorio en otros lugares del país al momento de hacer trámites en bancos o comprar pasajes, por ejemplo.