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Sofía, la primera menor trans en obtener su cambio de identidad en la CDMX
Con ocho años de edad, Sofía se convirtió en la primera menor de edad transgénero en obtener un cambio de identidad en la Ciudad de México sin la necesidad de llevar a cabo un proceso judicial, ya que su caso, al igual que el de los adultos transgénero, se realizó por medio de la vía administrativa.
Los padres de esta menor notaron que su hija era diferente cuando tenía tan sólo año y medio de edad, cuando aún la reconocían como varón y en medio de un procedimiento médico se emocionó porque le habían cambiado los pantalones por una bata: “Mami, me pusieron vestido”, señaló la menor, según cuenta su madre.
En el preescolar su comportamiento difería respecto al de otros menores, por lo que llamó la atención de las autoridades educativas, quienes realizaron un “plan” en el que solicitaron a los padres que la niña pasara más tiempo con su papá, a fin de tener “cerca una figura masculina”. Finalmente, la escuela decidió que lo mejor era que la menor cambiara de institución educativa.
Tras el incidente en esta escuela, la madre de Sofía decidió investigar sobre las personas transgénero y acercarse a organizaciones que luchan por los derechos de las personas LGBT; tal es el caso de Ser Gay, un colectivo que labora en Aguascalientes, que apoyó y orientó a los padres sobre su hija transgénero.
Luego de comprender la identidad de género de su hija, la menor comenzó a vivir bajo el género con el que se identifica y asistió de esa forma al colegio, el cual expresó diversas resistencias pese a que los padres poseían un dictamen a favor emitido por la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
Gracias al apoyo de la organización Litigio Estratégico en Derechos Sexuales y Reproductivos (Ledeser) y Ser gay, Sofia comenzó la lucha legal para que su identidad de género fuese reconocida de forma legal en sus documentos.
Luego de un largo proceso, este julio Sofía logró que el Registro Civil de la Ciudad de México reconociera su identidad de género por medio de un proceso administrativo, un hecho que sienta precedentes, ya que con anterioridad todas las rectificaciones de actas de nacimiento por identidad de género en menores de edad tenían que pasar por un juez, un médico y un psicólogo que “validarán” la identidad de género de la o el menor.
“Le enseñé su acta y me dijo ‘¿Esto qué es?’ Como que a ella no le hace falta un papel”, dice su madre sobre la identidad de género de su hija.
Con información de EFE.
