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Sólo un país en Latinoamérica acepta personas transgénero en el Ejército
Actualmente sólo 18 países en todo el mundo poseen normativas que permiten el ingreso y permanencia de personas transgénero en las filas del Ejército. En este grupo de Estados sólo aparece el nombre de un país latinoamericano, esto de acuerdo con un nuevo estudio realizado por The Hague Centre for Strategic Studies, una empresa de estudios sociales e investigaciones de mercado de corte institucional.
Este único país de América Latina es Bolivia, pues en 2016 el gobierno promulgo la Ley de identidad de Género, con la cual se “permite el procedimiento para el cambio de nombre propio, dato de seo e imagen de personas transexuales y transgénero en toda la documentación pública y privada vinculada a su identidad”.La ley enuncia 15 instituciones gubernamentales que tienen el compromiso de defender los derechos de las personas transexuales; entre las obligaciones de estas instancias se encuentra el incluirlos en sus filas laborales. Entre las instituciones incluidas en la norma está el Ministerio de Defensa.
Otros países que cuentan con normativas integracionistas para las personas transgénero son Australia, Bélgica, Bolivia, Canadá, República Checa, Dinamarca, Estonia, Finlandia, Francia, Alemania, Israel, Países Bajos, Nueva Zelanda, Noruega, España, Suecia y Reino Unido.
De acuerdo con el estudio, el primer Estado en permitir el acceso de las personas transgénero y transexuales en su Ejército fue Países Bajos en 1974, cuando introdujo una normativa que regulaba el ingreso de las personas trans en las Fuerzas Armadas.
Para 2014, Israel, un país que en los últimos años ha buscado impulsar una imagen progresista e inclusiva en materia de derechos humanos, se convirtió en el primer país de medio oriente en incluir personas transgénero entre sus filas. El primer hombre transgénero en ingresar a esta institución en el país fue Shachar Erez.
El caso más reciente sobre la aprobación de personas trans en instituciones Bélicas fue en 2016 en el Reino Unido. El cambio en los perfiles de ingreso y permanencia sucedieron después de que uno de los elementos activos se reconociera públicamente como transgénero e iniciara su transición mientras se encontraba en servicio; con esto Chloe Allen se convirtió en la primera mujer transgénero en permanecer en las filas del Ejército.
La reciente atención alrededor de la inclusión de las personas transgénero en instituciones bélicas se generó después de que la semana pasada el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se negara a abrir las puertas de las Fuerzas Armadas a estas personas. El mandatario argumentó que su inclusión significaría un gran costo debido a la financiación de su salud.
Organismos locales e internacionales a favor de los derechos humanos mostraron su desaprobación ante la resolución de Trump, pues aseveraron que esta acción vulnera los derechos de las personas transgénero y sirve de antecedente para que Estados Unidos desampare a esta población, ya que de acuerdo con cifras estimadas, el Estado es el principal empleador de personas trans.
