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Drag queen y musulmana; Glamrou lucha contra discriminación de occidente hacia los inmigrantes
Amrou Al-Kadhi es un joven actor abiertamente homosexual y drag queen que comenzó su carrera actoral hace 12 años en una película de Seteven Spilberg. Al-Kadhi, quien es de ascendencia iraquí y de nacionalidad británica, ha comenzado a utilizar su visibilidad como drag queen para luchar en contra de la discriminación y la subvaloración de la vida de los inmigrantes y de las personas musulmanas que habitan en el Reino Unido
“La intención política de mi resistencia ha sido siempre presentar una representación edificante de mi identidad minoritaria, en particular, para mostrar que ser musulmán y queer puede ser una combinación feliz para Gran Bretaña”, señala Glamrou, su nombre drag, en una columna para Mirror.
El joven de 26 años de edad ha participado en múltiples manifestaciones en contra de las coaliciones políticas conservadoras en el Reino Unido y constantemente evidencia la narrativa que algunos grupos políticos y organizaciones utilizan para asegurar que “la caída de Europa” es culpa de los inmigrantes, una posición que se sustenta en la islamofobia.
“Quería mostrarme como un inmigrante musulmán queer que no es ni una víctima o un villano en el oeste, pero sí una orgullosa reina a cargo de su identidad”, señaló.
Luego de participar en una manifestación en contra del Partido Unionista Democrático (considerado el quinto partido más fuerte de Reino Unido con una ideología conservadora en contra del matrimonio igualitario y el aborto y cuya mayoría de sus integrantes son cristianos evangélicos) comenzó a recibir amenazas de muerte por primera vez en su vida.
Una publicación de una sección de la Liga de Defensa Inglesa, un grupo de extrema derecha británico que se opone al islamismo, la sharia y la construcción de mezquitas en el territorio, utilizó su imagen para caracterizar lo que la agrupación llama “la islamización de Gran Bretaña”. Además, recibió mensajes en su cuenta personal de Facebook de parte de supremacistas blancos donde le decían que “irían a buscarla”.
Amrou dice que la reacción de los integrantes de la ultraderecha no le sorprende; no obstante, resalta su preocupación por las reacciones de grupos que al igual que él sufren opresión de alguna manera, como la comunidad gay y la comunidad islámica.
“Los musulmanes conservadores me amenazaron de manera similar por asociar mi identidad con el Islam, los fundamentalistas me enviaron correos electrónicos que me dijeron que mi ‘existencia es una abominación’”, declaró.
Además agregó: “Esto (el odio) podría esperarse de los supremacistas blancos, pero aparece en lugares sorprendentes. Por ejemplo, muchos espacios gay están llenos de islamofobia, con incidentes de odio denunciados en el Orgullo Gay y muchos hombres que afirman que ‘no tienen citas con asiáticos’ en aplicaciones”.
Glamrou afirma que viven en medio de dos culturas, la británica y la islámica, situación que la coloca en un espacio complejo para su identidad; no obstante, el drag la ha ayudado a reconciliar ambas partes de sus identidades.
“Para mí, el drag ha sido el pegamento que mantiene unidos los fragmentos de mi identidad. Cuando estoy en resistencia puedo aferrarme a los elementos positivos de mi educación musulmana antes de que las cosas se volvieran traumáticas”.
“Cuando era niño, el Islam solía consolarme: las oraciones rituales cinco veces al día eran como meditaciones pacíficas, lo que me ayudaba a comunicarme con Alá en un nivel personal y tranquilo. Antes de entender realmente que era gay y seguidor del género, tenía una fe inquebrantable en el amor incondicional de Alá hacia mí, y como tal, el Islam me enseñó a amarme a mí mismo”.
Amrou Al-Kadhi no sólo lucha contra la islamofobia y la discriminación hacia los inmigrantes, sino también hacia los estereotipos violentos que encasillan a las personas musulmanas en el terrorismo. El actor afirma que debido a su apariencia los directores de cine los buscan para interpretar papeles como terrorista.
Con información de Mirror y Step Feed.
